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Magma

Hillary se quedó fuera de la tienda de subastas, no sabría que podría hacer con Magma y con ese tema de los anillos, solo estaba deseando encontrarlos y destruirlos para que nadie más pudiera cambiar de cuerpo, por accidente o para aprovecharse. Baley miro a su nueva amiga y sonrió, para ella era como si fuera su hermana pequeña y le intrigaba verla tan seria:

-¿Qué te pasa cariño?

La jovencita asintió con la cabeza y miró a su amiga:

-Tengo todos los problemas de un adulto en un cuerpo de adolescente y quiero que nadie más le pase lo mismo.

Magma salió de la tienda, llevaba puesta unos pantalones tejanos muy estrechos y una camiseta muy corta mostrando el ombligo, algo hinchado, le costaba hacer la digestión de lo que le había hecho tragar su madre. Se tiraba pequeños eructos.

Steve Retters una gran sorpresa

La voluptuosa chica entro en la biblioteca en busca de Steve, era un friki seguro que estaba con sus libros raros de rol, la chica escucho un ruido, unos gemidos de placer, la chica en unos de los pasillos se encontró con Will y se saludaron:

-¿Estás buscando a Steve?

-Si ¿Dónde está?

El chico señalo el final del pasillo, sabría que cuando vieran el tamaño de la polla de Steve la chica de enormes pechos se sorprendería, seguro que nunca había visto algo tan grande, seguro que nunca había visto lo que estaba haciendo Rita:

-Davita ten cuidado el tamaño de esa polla es enorme.

Davita asintió con la cabeza:

-Eso espero.

La chica fue al final del pasillo y vio a Steve sentado encima de unos libros y a Rita con esa gigantesca polla entre las manos, dejando que cayera encima de sus pechos, se había quitado la camiseta para no mancharse posiblemente de semen, ella con las manos masturbaba esa bestia, bajaba y subía pieles y le pasaba la lengua por su gigantesco capullo, que era del tamaño de la cabeza de un niño de tres años. Davita se quedó con la boca abierta y se fue desnudando poco a poco para poder comenzar a follar.

Mi vida con las estrellas 2 El gran campeonato femenino

Ellen miro a los ojos a Talix y asintió con la cabeza, estaba más que convencida por la historia que había escuchado, se levantó de la mesa con media sonrisa asintió con la cabeza, estaba preparada para un nuevo entrenamiento y para luchar en ese campeonato.

-Contar conmigo y con mis amigas, ellas me ayudaran para encontrar a esa nueva chica y para luchar en el torneo.

Wanda trago saliva y miro a su hermana pequeña Miran, solo esperaba no participar en ese torneo femenino:

-¿Ellen yo y mi hermana?

Ellen sonrió al mirarlas:

-Yo os tengo que tener vigiladas, vosotras participareis ¿No queremos más feminazis en la tierra?

Wanda bajo la cabeza impotente, no sabría que decirle a Ellen, su hermana negó con la cabeza al escuchar eso, al ver como su hermana se dejaba vencer:

-Bueno al menos seremos las buenas?

Ellen asintió con la cabeza:

-Pues claro cariño.

Emma y Dafne salieron de la dimensión donde estaban entrenando, había sido duro pero tenían que aprender a usar toda la energía femenina que tenían en sus cuerpos, las chicas se habían puesto unos chandals para el entrenamiento y habían sudado sin cesar.

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