martes, 22 de octubre de 2019

Novedades


Belladona 3 en la cárcel


Rebeca por el tiempo que me veía en esa cárcel se había enamorado de mí, al tratarme con algo de cariño yo me deje llevar totalmente por ella, me besaba con cariño y también me sentía segura al ver que ella vestía de guardia. Ella de un bolsillo saco un paquete de pastelitos y me lo dio, yo lo cogí con una sonrisa.

-Espero que con esto se te pase un poco el dolor, estaba viendo lo que te hacían esas.

-Mmm, tardo un par de días en olvidar el dolor de todo mi cuerpo, como actriz porno necesito un poco de descanso para que todo vuelva a su tamaño natural, es un decir ya que me podría caber un bate de béisbol por al coño...........



Una chica que sera como las demás 4

Gina negó con la cabeza al ver como sus hijos subían por la escalera, quería ser la madre perfecta pero se lo pondrían tan complicado, negó con la cabeza y apretó con fuerza su mano, tenía que estar decidida para que sus hijos le tuvieran respeto y se dejaran querer fueran lo que fueran, unos chicos o unas chicas. Subió por la escalera y corrió hacia la habitación de Brenda y Rubén, intento abrir pero habían cerrado la puerta con cerrojo:


-Venga abrir tengo que hablar con vosotros.

Brenda se quedó sentada, puede ser que su hermano, su nuevo hermano se transformaría en mujer como ella, teniendo su primera regla, pero ella ya no sabía si tendría la regla, si estaba embarazada. Rubén seguía dolorido, estaba tumbado en la cama con las manos en sus caderas:

-¿Te encuentras bien Rubén?




Mil habitaciones, dimension sexual

Abri los ojos como platos al sentir la fuerte luz que me cegaba, me quede así un buen rato hasta que mi vista se adaptó, pasando del fogonazo de luz blanca a volver lentamente a iluminación mas normal. Cuando puede ver donde estaba negué con la cabeza para aclararme y situarme, vi que estaba en el jardín, me mire las manos eran pequeñas con las uñas bastante largas y pintadas de rojo, vi que mi piel era algo más morena y me toque el pelo, pude ver que era oscuro, a hora era una chica morena y sobre todo tenía un impresionante tamaño de pechos, me acaricie mi ombligo y pose mi mano en mi entre pierna, tan plana y que marcaba mi nuevo coño. Me levante de la hamaca y mire ami alrededor, vi una verja y una pequeña puerta, podría ser mi salida. Intente abrirla pero era imposible, parecía que estaba sellada, me faltaba fuerza como mujer para abrirla. Mire frente de mí y pude tocar una extraña barrera que me separaba de todo. Negué con la cabeza pensativa:


-Esta todo cerrado, parece que esta casa está en una capsula, entonces todas las dimensiones sexuales son sus habitaciones.


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Rol tg





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